TRABAJADORES REMOTOS: UN ANÁLISIS DEL FUTURO DEL LUGAR DE TRABAJO

Existe un mito común entre los gerentes de que los empleados que trabajan desde casa son notoriamente improductivos. La visión caricaturesca de un empleado sentado en su sofá en ropa interior haría que cualquier gerente se estremeciera, pero recientemente el trabajo remoto ha comenzado a crecer como una alternativa popular al entorno de oficina tradicional. Incluso están surgiendo nuevas investigaciones sobre las ventajas de que sus empleados trabajen de forma remota y los beneficios que puede tener en su productividad.

Por lo tanto, por hoy disiparemos los mitos que rodean al trabajo remoto y profundizaremos en la verdad de los empleados externos.

Trabajadores remotos

Comencemos indicando algunos datos sobre los trabajadores remotos. Un estudio realizado por Upwork en 2017 midió que 57,3 millones de estadounidenses trabajan por cuenta propia y contribuyen aproximadamente con 1,4 billones de dólares anuales a la economía. En ese mismo estudio, los investigadores concluyeron que se proyecta que los trabajadores independientes serán la mayoría de la fuerza laboral de EE. UU. Para 2027.

Un famoso estudio de investigación de Stanford de dos años en 2014 constató los beneficios de los empleados que trabajan desde casa. El estudio analizó la agencia de viajes más grande de China, Ctrip, una organización de más de 16.000 empleados. Los empleados se dividieron en dos grupos, un grupo de control (que continuó trabajando en la sede central) y los trabajadores seleccionados al azar y fueron estudiados durante dos años.

Los resultados del estudio encontraron una mejora del 13% en el desempeño de los empleados que trabajan desde casa, esta tendencia fue causada por los empleados que trabajan su turno máximo desde casa, mientras que los empleados que viajan al trabajo llegan tarde, toman almuerzos largos o se van temprano causando que no trabajen su turno completo. También se encontró que las tasas de abandono disminuyeron en un 50% en la empresa debido al mayor compromiso de los trabajadores por trabajar desde casa. Y finalmente, los investigadores descubrieron que cuando el programa se implementó en toda la empresa, la productividad aumentó al 26% cuando a los empleados se les dio la opción de trabajar desde casa.

Otro efecto secundario involuntario del estudio del aumento de empleados que trabajan desde casa para el negocio fue una reducción en los espacios de oficinas de la sede. $ 2,000 ahorrados por empleado en alquiler al reducir el espacio de oficina para alojar a los trabajadores desde casa (Shanghai es una ciudad notoriamente cara para trabajar). Trabajar desde casa también ahorra tiempo a los empleados, ya que Oficina del Censo de EE.UU informó que el tiempo promedio de viaje de ida es de 26,1 minutos. Viaje de ida y vuelta, cinco días a la semana, que suma hasta 4,35 horas a la semana y más de 200 horas (nueve días) al año.

Los desafíos del trabajo remoto

Lo anterior sugeriría que todas las empresas deberían adoptar un modelo de trabajo desde casa para sus empleados, pero existen algunos factores complicados para decidir si sería adecuado para una empresa.

La Asociación de Ciencias Psicológicas realizó una evaluación de la eficacia de los programas de trabajo desde casa. Sus hallazgos fueron que la efectividad de un programa de trabajo desde casa dependía de la forma en que se ejecuta el programa, las necesidades específicas de la organización, el trabajador individual y las circunstancias. Por ejemplo, en el estudio de Stanford, los trabajadores de Ctrip tenían una ventaja de trabajar desde casa, ya que los trabajos de los trabajadores estaban relacionados con las ventas.

Aunque el número de estudios sobre programas de trabajo desde casa está creciendo, la investigación aún tiene un alcance limitado a la efectividad de tales programas en otros campos de trabajo. Actualmente, también hay una falta de estudios a largo plazo sobre los efectos de los programas de trabajo desde casa en la productividad, ya que la mayoría de los estudios solo se han realizado durante unos pocos meses o años. Los efectos a largo plazo de trabajar desde casa sobre la productividad, la moral y la comunicación son todavía desconocidos en el campo.

La conclusión es que la mayoría de las investigaciones apuntan hacia un aumento de la productividad en los trabajadores remotos en comparación con los que trabajan en el entorno de oficina tradicional, pero esto no es una garantía en algunos campos. Sin embargo, si el trabajo se puede hacer desde casa, los estudios muestran que los empleados verán un aumento en la productividad al trabajar desde casa, pero la productividad está sujeta al programa que el empleador implemente.

Aunque la investigación todavía es limitada sobre los efectos de los programas de trabajo desde el hogar, el estigma que rodea a los empleados remotos debe disiparse según la investigación actual. Es hora de que Manger comience a abrazar la marcha de los trabajadores remotos hacia el futuro de cómo trabajamos en los Estados Unidos.

 

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